EL PRIVILEGIO.
Son las dos de la madrugada de una de tantas noches de hospita l-para mi la numero diez, porque aquí las cuentas- siento como mi compañera (una mujer de 81 años perfectamente cabal y consciente) llama al timbre y pide que por favor le pongan la cuña... Son las seis de la mañana, me quede dormida, nadie atendió la llamada de la 810-b, mi compañera me cuenta con mezcla de ira e impotencia en la voz que se ha despertado empapada en su propia orina. Le ayudo a ir al baño para limpiarse la dignidad que hoy amaneció húmeda.
Hoy ha llegado uno de los niños con los que trabajo (soy enfermera de hemato-oncología infantil) en estado terminal. Una bebita de menos de un año, su deterioro es evidente. El equipo médico ante mi asombro se limita a pautarle dos transfusiones de sangre y nolotil IV sí hay dolor cada 6h. Yo solo puedo organizar las cosas pues hay un aneurisma en la general y el banco de sangre esta colapsado por lo que ni siquiera puedo ponerle una de las transfusiones; solo recuerdo haberle dado gasas a la mamá para la hemorragia de los oídos, la bebita se fue con su dolor,¿nadie más oía ese quejido?
Se me ha infectado la vía central femoral, ayer por la tarde me la retiraron pues ya lo sospechábamos y me cogieron la femoral de la otra pierna. Cuando esto ocurre el cuerpo experimenta una serie de síntomas que indican que hay infección, yo los conozco, soy enfermera. Paso la noche en vela sudando mucho, es el comienzo del proceso, aviso a la enfermera que me lleva en el turno de mañana, me pone el termómetro,37'5ºC así que me dice que espere a los médicos, yo pase la noche en vela, sudando y soy enfermera, sé lo que me está pasando, pero soy enferma y solo puedo acurrucarme y destaparme para que la fiebre no suba tanto.
Casi todos mis niños llevan un port-a-cath, es un cateter que va directamente al corazón y permite hacer muchas cosas sin tener que pincharles más de una vez. La técnica de su uso es limpia y sencilla, pinchas en un reservorio de silicona con la base metálica. Lo mejor es que evita mucho dolor al niño. Hoy al pinchar el port-a de uno de mis niños veo que tiene un enorme hematoma en todo el reservorio;"un pinchazo mal dado "-me dice la madre, yo mientras aparto la piel magullada para poder pincharle en otro lugar me pregunto cómo se puede llegar a producir esa lesión, ¿mal uso del catéter? esto es un hospital, somos enfermeras!!...
Son las 4 de la madrugada de mi doceava noche en el hospital. Me despierta mi compañera, no puede más, hace dos horas que llamó para que le pusieran la cuña, se hace de vientre y ya se ve despertando encima de su propia mierda. Me levanto, cojo todos mis cachivaches (palo de goteo con la parenteral) bajo las barandillas de su cama y la ayudo a incorporarse e ir al baño, espero, ella se siente aliviada, me da varias veces las gracias, se siente humillada pero se duerme.Yo siento vergüenza, esto no deberia pasar, ya no puedo dormir más en esta noche de tantas en el hospital.
Hoy ha vuelto mi bebe terminal, sigue el deterioro, el lunes estuvo aquí; se limitaron a lo mismo que la vez anterior; yo pude ponerle la primera transfusión y hablar un poco con esta madre, se siente sola, nadie le ha dicho que su hija se muere, no entendemos aún que lo que para nosotros resulta evidente para ellos es difícil de creer. Y no tiene opción, volvió a casa con su bebe y ese quejido. Hoy miercoles ya no hay descanso para mi bebe, el quejido ahoga el llanto y a pesar del mal estado físico lo más duro es su mirada, grita cuanto le duele, nos dice que se muere; se limitan a lo mismo pero yo ya no puedo más,le paso la primera transfusión y sin que esté pautado le he puesto doble dosis de analgesia que le dan 15 minutos sin quejido,respirar es tremendamente costoso para ella..tengo que hacer algo. Al final la ingresan, eso significa un descanso para esta madre y quizás si miran bien al bebé empiezen con la infusión de morfina y la ayuden al buen morir. Puedo hablar mucho hoy con la madre, me cuenta su historia...sigue ingnorando que su hija se muere y le privamos con ello de su derecho a decidir como desea que sea ese momento, a despedirse.
Son las 9:30 de mi dia 17 en el hospital, mi cuerpo ha comenzado a experimentar la tiritona incontrolable, me siento francamente mal, cuando pasa la enfermera se lo digo, me pone el termómetro,40.5ºC,"a ver que te ponen los médicos"-me dice, estoy cansada asi que me limito a cerrar los ojos y esperar. Viene mi hermana, se asusta, le quito importancia, sé lo que me ocurre, empiezo a delirar. Me han visto los médicos asombrados de encontrarme "a mí" así. Pautan los hemocultivos (pruebas analíticas que se deben realizar en el pico febril y son indispensables para encontrar "al bicho" que produce la infección) después de eso pueden bajarme la fiebre y empezar con los antibióticos. Son las 11h. sigo diciendo tonterías. Hasta las 14h. la enfermera molesta no me saca los hemocultivos. Que alivio, y que mal rato; estoy tranquila, se que no pasa nada, sé lo que es.Y esto te pasa a tí que eres enfermera"-me dicen .
Uno de mis niños que llevaba 6 meses sin tratamiento en remisión de la enfermedad ha recaído; debemos pasar a la segunda fase de la quimioterapia, esto no es algo raro en su enfermedad y la fase dos suele ser eficaz. Estoy alucinada porque nadie informa a estos padres, yo en teoría no debo responder y limitarme a decirle que se lo pregunten a su médico, por fín hablan con ellos pero no les dicen más que todo sigue bien.....mierda, descubro además que esta madre desconoce hasta el hecho de que la enfermedad de su hijo es genética, hereditaria. Después de hablar con ella se va contenta,nos abrazamos (tiene dos años menos que yo) y me pide que este aquí cuando vuelvan a sesión.
Mi bebita terminal murió el viernes a las 5 de la madrugada, el quejido nunca se dejo de escuchar, y yo sé que lleva dos semanas muriendo con dolor....¿qué hemos hecho?
ASI PERDEMOS NUESTRO MAYOR PRIVILEGIO desde nuestro puesto de profesionales de la salud, la CAPACIDAD DE ANULAR,LIMITAR,LIBERAR EL DOLOR DEL SER HUMANO.
No se nos pide nada especial, no es cuestión de ser mas o menos majos, más o menos agradables y entregados; se trata de cubrir las necesidades básicas de los enfermos, manteniendo su dignidad, haciendo que sigan siendo personas dentro de la limitación e impotencia que impone la enfermedad. En pleno siglo XXI no podemos tolerar o permitir el sufrimiento gratuito y la muerte dolorosa, hagamos uso de este privilegio nuestro, solo detenerse, escuchar pues nos hablan con su cuerpo cuando ya no pueden hablar y siempre queda algo por hacer, siempre nos podemos superar. Los llaman errores de base, los equipos de salud funcionan mal por sus errores de base, hay profesionales mejores y peores como en todas partes, lo importante es no quitarle lo profesional a ese mejor o peor y creer en lo que haces, a pesar del desencanto y la limitación, ser capaces de ver el error, denunciarlo y cambiarlo para que no vuelva a ocurrirle a nadie más. Como enfermera deciros a todos los profesionales de la salud que aún fallamos en lo básico,recordar para quien trabajamos, son personas que sufren y tenemos el PRIVILEGIO DE AYUDARLES.
2 respuestas humanas:
Asi es nuestra profesion es privilegiada tenemos el don de acompañar y de ofrecerle dignidad a quien se la han robado o que la ha perdido, no se dejen llevar por larutina hay que echarle ganas
www.quinonesnursing.com
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